jueves, 18 de febrero de 2021

Oh vida


¿Dónde estoy? No se ¿Estoy donde quiero estar? No ¿Te sientes perdida? Mmm… no. ¿Qué le puedes decir a la vida? Quizá a la vida no le pueda decir mucho, mas bien ella es la que me dice mucho a mi y yo decido ser consciente de querer escucharla o seguir en mi comodidad como si nada estuviese pasando. A la que si le puedo decir algo es a mi yo de hace un año, a mi yo de todo el 2020. 

Sabemos tu y yo que ha sido el año de más cambios en tu vida, el año en el que más descubrimiento personal tuviste, pero sobretodo ha sido un año en el que has aprendido a valorar a las personas y sus opinión, en el que hoy sabes que eres un poco más consciente de que tus acciones repercuten en los demás y que si te tienes que hacer responsable de los sentimientos que llegues a provocar en tus personas cercanas. 

Haz llorado mucho, te haz enojado demasiado, pero sobretodo abriste los ojos a una nueva forma de vivir y ver la vida, que bien sabíamos no iba a ser nada fácil, que te iba a sacar de tus comodidades y tenias que empezar a ver por tus intereses. Pero lo más difícil fue escucharte por primer vez. Pero no lo solo escucharte, reconocer que es lo que quieres y que es lo que no quieres, darte cuenta que muchas de las cosas que estabas persiguiendo no eran tus sueños si no una idea que te habían vendido nada más. 

Hoy no haz llegado a donde quieres estar incluso ni siquiera estas a mitad del camino y solo quiero que recuerdes una cosa todo se acomoda, todo mejora. Hoy estas en un camino de crecimiento, de aprendizaje constante y sobretodo de altas y bajas, como lo dijimos hace unas líneas arribas, sabíamos que no iba a ser fácil pero lo estamos logrando porque hemos decido dar ese paso, donde lo más importante es no dar pasos atrás, si no siempre firmes y seguros para poder subir las montañas cuando estemos abajo.

 Al final del día todo esto es un camino, todos los días de tu vida son una travesía con días soleado, con días lluviosos, con huracanes y tormentas, donde si no te mueves te ahogas, quemas o te enfermas. Que conforme pase el tiempo se te van presentando nuevos caminos y bifurcaciones donde vas a tener que tomarte un momento, disfrutar el paisaje, meditar y elegir hacia donde quieres llevar tu vida.

No importa el miedo y la incomodidad que puedas pasar, porque al final siempre las cosas mejoran y te quedas con el conocimiento de esos días. Porque llegará el día en el veas al pasado y te quedes admirando el bonito paisaje de tu presente. No te rindas que hoy ya estas más cerca de lo que estuviste ayer, pero sobretodo no olvides que aun te falta camino por recorrer, conocimiento por adquirir, y sobretodo mucho amor por descubrir. Porque la clave del éxito en esta aventura llamada vida es el amor y confianza que te tienes para ir a perseguir tu sueños y lograr estar en el pedestal de la mejor versión de ti.

No midas el tiempo, mide tus decisiones, tus aprendizajes y acciones un día a la vez.

 

martes, 18 de agosto de 2020

Más perdida que nunca.

 ¿Perdida? Si, ¿Angustiada? También. ¿Con miedo al futuro? Eso ni se diga. Estoy en un punto de mi vida donde siento que retrocedí y me volví más insegura que antes. Al iniciar la universidad me generaba mucha ansiedad ver como mis excompañeros de la preparatoria disfrutaban sus experiencias universidades al máximo y sobretodo eran felices estudiando sus carreras. Ahora estoy viendo como mis excompañeros de la universidad se están realizando con sus proyectos profesionales. Pero aquí lo importante y lo que muy pocas personas e incluyo yo me he preguntando es a donde quiero dirigir mi vida. Después de 5 años de enfocarme plenamente al área de la salud, ¿en realidad es eso lo que quiero hacer para siempre?.

Claramente no estoy segura. Hay muchos factores hoy en día que me han hecho dudar de esa decisión. Uno de ellos  es retomar viejos pasatiempos, como es escribir y dibujar. Mi lado creativo que sepulte el día que deje artes visuales no ha querido morir y desea resurgir entre las cenizas. Y es ahí donde me doy cuenta que muy probablemente no lo quise sepultar en su totalidad, que no enterré una idea, si no una semilla que hoy se ha aferrado más a mi mente, que le han salido raíces y no quiere ser arrancada de mi vida.

Nunca nadie me dijo que a mis 24 años volvería al dilema de ¿Qué quiero ser de grande?. La verdad hoy en medio de una pandemia no tengo la respuesta, pero lo que si sé, es que quiero ser feliz, quiero sentirme realizada y hacer del mundo un mejor lugar, donde las equivocaciones vocacionales no sean mal vistas, si no reconocidas como valentías por cambiar el rumbo de tu vida sin importar cuanto llevas recorrido.

Patrushka del futuro, sea lo que sea que vayas a elegir, hoy no estas en el mismo punto. Hoy tienes más inteligencia emocional, te conoces un poco mejor y tienes muchas experiencias del pasado para saber que es lo que realmente te hace feliz, ahora solo te toca quitarte la venda, levantarte de la comodidad y trabajar por tus metas que por ahora solo tienes claro una, la meta de ser feliz en esta vida.

Si quieres compartir mis palabras con alguien que creas que le pueda servir te regalo mi historia.



jueves, 25 de junio de 2020

Mi primer acercamiento con la compa menstrual.

Siempre he sido una persona muy curiosa aunque un poco temerosa para experimentar cosas nuevas. La idea de probar la famosa copa menstrual había estado en mi cabeza desde hace algunos meses atrás, pero mi rutina diaria de ir de aquí para allá y nunca estar en mi casa no me lo había permitido.

Desde que empezó la cuarentena me propuse a hacer, experimentar o al menos intentar cosas que por falta de tiempo no había hecho. Durante las primeras semanas empezaron a salirme en todas mis redes sociales anuncios sobre la copa menstrual, diferentes marcas, colores, tamaños. Ahí fue cuando dije “bueno, creo que el momento ha llegado de darle una oportunidad”. Empecé a tener muchas dudas. ¿Cuál es la mejor? ¿Qué tamaño debo de usar? ¿Dónde la consigo? ¿Cuánto cuesta? ¿En verdad la quiero probar? ¿Por qué la quiero probar?.  Viendo videos, leyendo experiencias, hablando con una amiga que la utiliza, llegue a conseguir la mía, en realidad no fue tan difícil de adquirir, hasta ese día no tenía ni idea que en las farmacias las venden. Elegir la talla es lo más sencillo del mundo, la marca te da indicaciones claras y concisas para saber cual es la mejor opción para ti. Bueno mi momento había llegado, solo tenía que esperar a que me bajara para introducirme al mundo de la copa.

 

La verdad si tuve que esperar un poco, porque debido a mis cambios de rutina, ansiedad, estrés y un poco de malos hábitos del sueño, tuve un pequeño retraso, pero el domingo pasado sucedió, jamás había deseado tanto que me bajara como en esta ocasión. En este punto de la cuarentena ya había visto muchos videos de experiencias tanto buenas como malas, leí el famoso hilo de twitter donde nos narran la traumática experiencia de una niña que no pudo retirarla y terminó en el doctor, me sabia la historia de cómo una mejor amiga terminó retirándosela a otra niña, bueno para no hacer largo esto, tenía muchas historias de terror en la cabeza y como me dijo a mi amiga, mentora en la copa me predispuse y me cause un miedo innecesario lo que ocasionó que colocarla fuera un poco difícil.

 

La primera técnica que intente fue sentada en el inodoro, evidentemente no lo logre por lo que decidí probar la siguiente, levanté una pierna y la apoye en la pared tampoco funcionó, en este punto ya me había desesperado un poco pero no quería darme por vencida. Utilice un poco de mi lógica clínica y pensé necesito una posición donde mis músculos del suelo pélvico estén relajados y pueda introducirla bien.  Así fue como decidí acostarme, prender una velita y poner música para crear un ambiente de relajación total. Esta vez estaba funcionando la bendita copa estaba entrando cada vez más y sentí un pequeño “plop” por lo cual asumí que ya se había abierto, pero ojo a esto yo siempre tenía agarrado el palito para que no se vaya a un lugar más profundo.  Después del tan esperado plop el palito de la copa empezó a hundirse un poco, en ese momento en mi mente pasaron todas esas historias donde la copa se iba muy adentro y no la podían sacar así que me desespere y puje para hacerla bajar y poderla sacar.

Una vez afuera me tranquilice y dije “bueno Patts si pudiste sacarla ahora la vas a poder sacar después”. Volví a hacer mi ritual de la copa, una vez habiendo tenido éxito, me levante camine, salte, hice un squat para asegurarme que estuviera bien puesta y no sentir incomodidad.

Pase con ella alrededor de 8 horas, sin ninguna incomodidad que generalmente me ocasionan las toallas, no tuve ninguna filtran y no se sentía como si estuviese en mis días. Llegó el momento que más miedo me daba, la hora de la verdad, quitarla.

Ahí fue cuando tuve mi sorpresa quitarla es aún más fácil de lo que pensé, fue menos de un minuto y sin ninguna sensación desagradable, solo tuve que pujar y apretarla para romper el vacío.

Los consejos que te puedo dar si estás pensando en probarla son, lee las instrucciones que te dan cuando la compras, ve uno o dos videos POSITIVOS de cómo utilizarla, si tienes amigas utilizándola acércate a ellas y pregúntales qué les funciona y que no. Y sobretodo  todas tus dudas, para eso estamos las amigas ¿No?. La más importante NO VEAS HISTORIAS DE TERROR porque harán que no disfrutes la experiencia como me paso a mi.

 

No la utilice durante todo mi periodo pero si en los días de más sangrado y donde hice más actividades. ¿La volvería a utilizar el siguiente mes? Claro que sí, sin dudarlo les puedo decir que ha sido una de las mejores adquisiciones que he tenido en cuarentena.

La próxima vez planeo probarla por la noche también, para tener una experiencia completa.

Utilizarla te hace sentir mucho más libre, más cómoda, nada limitada en hacer lo que más te gusta como bailar, saltar, hacer ejercicio u otra actividad donde no dejas de saltar como chapulín durante el periodo y sobretodo te hace empoderarte a ti y a tu periodo, dejarlo de ver como algo desagradable y empezar a conocer más el proceso, la textura, color y olor de tu sangre, te hace ser más cercana a ti.

Valoras y respetas lo maravilloso que es tu cuerpo y todo lo que hace en estos días.

Hay que hacer un lado el tabú y empezar a disfrutarla siempre la vida hasta en los días donde estamos menstruando.



domingo, 7 de junio de 2020

Eres esto y mucho más

✨Este es un recordatorio para ti. 
✨Puedes lograr todo lo que te propongas 
✨El éxito no se da de la noche a la mañana, se trabaja duro para lograrlo 
✨Eres bonita con maquillaje, sin maquillaje, con granos, sin granos, con filtros y sin filtros
 ✨Un día a la vez
 ✨Nunca dejes de sorprenderte por las cosas más pequeñas de la vida 
✨Hay días malos, no una mala vida
✨Eres privilegiada, porque privilegiada es la persona a la que Dios ama
✨Enamórate del alma no del empaque 
✨Tu eres la persona más importante de tu vida 
✨Ojo a esto también eres tú propio sabotaje 
✨Eres valiente 
✨Eres única 
✨Tu pasado no te define
✨Amas caminar bajo la lluvia 
✨Tu vida es un recorrido sobre el camino de baldosas amarillas tratando de descubrir día con día “Who are you?”
 ✨Sabes inglés, YASSS Queeeen!
✨Amas el Drag y todo contenido lgbtiq+
✨Eres muy picky con la comida 
✨Practicar yoga te llena el alma
✨Hoy 3 de Junio del 2020 en medio de una pandemia te volviste a poner tu short favorito después de muchos años. 
✨Tu color favorito es el verde chinga retinas 
✨Amas trabajar con niños 
✨Admiras mucho la discapacidad
✨Tu gemala te cuida y te apoya desde ahí arriba 
✨Tienes a las 2 mejores mejores amigas que alguien pudiese tener
✨NO ERES UN ESTORBO NI UNA CARGA 
✨Hay gente que está agradecida por tenerte en su vida 
✨Eres distraída y por eso te pasan cosas
✨El sarcasmo es parte de tu vocabulario 
✨Estas trabajando en ser más empatica
✨Amas hacer que tus amigos se acuerden del juego y de respirar 
✨Amas escribir y por eso haces esto 
✨Amas reír hasta que te duela la panza 
✨Eres Patrushka Mayte Pinkus Sosa
Tu principal reto de la pandemia es no perderte en tus pensamientos, eres esto y mucho mas💜

jueves, 14 de mayo de 2015

Decisiones...

La vida esta llena de decisiones y siendo sincera soy la peor persona para tomar una de ellas...
Desde lo mas básico como elegir entre un sandwich o unos hotdogs para el desayuno, hasta algo más complicado como que licenciatura voy a estudiar.
Según yo siempre he sido una persona que no se le facilita tomar decisiones y cuando era pequeña no era un problema, simplemente elegía  y si no me gustaba lo cambiaba o simplemente la próxima vez que tenga que elegirlo de nuevo, mi decisión no iba a ser la misma.
Tener problemas al elegir el desayuno no es algo que impacte mucho en mi vida, lo complicado esta al no decidirme lo que quiero hacer cuando sea más grande. Eso ocasiono a llevarme donde estoy ahora.
Técnicamente soy nini, pero no fue mi culpa era algo que tenia que pasar. Al principios de año empece a estudiar la licenciatura en artes visuales, y todo iba bien, me gustaban mis materias, me agradaban mis compañeros, pero el semestre fue avanzando y yo escuchaba como todos mis amigos me hablaban maravillas de sus carreras y como estaban enamorados de ellas y que no les costaba ir a la escuela, y para mi no era asi, si me gustaba pero no era algo que me enloqueciera y en algunos puntos llegaba a ser cansado.
Hasta Marzo la idea de cambiarme de carrera no era una opción, hasta que en semana santa me fui de misiones a una población que hizo darme cuenta de muchas cosas.
Entre ellas esta que me gusta el trabajo con la comunidad, tratar con las personas para ayudarlas no solo para venderles cosas o convencerlas de hacer las cosas. Sentía que si me quedaba estudiando artes me iba a estancar, que podía dar mas, que mi lugar no estaba en esa licenciatura, que tenia que empezar a buscar algo que me hiciera feliz.
Un día mientras acompañaba a mi mamá a tu terapia, el fisioquiropractico empezó a hablar de que le gustaba aplicar masajes que relajen a los músculos para luego poner un agente. Y fue cuando me llamo mucho la atención, saliendo de la terapia le dije a mi mamá que que pensaría si estudio fisioterapia. Se empezó a reír y me dijo que estaba loca.
Empece a investigar sobre la carrera y sobre que universidades la tienen, hable con varias personas que están apunto de terminarla, pedí opiniones hasta a las piedras. Todo iba bien hasta que me dijeron, "tienes que tomar una decisión ya".

Desde aquel día que tome mi decisión, en mi cabeza gira la pregunta, "¿Habré tomado la decisión correcta?
Eso es algo que solo sabre con el paso del tiempo, pero esta algo me dice que si fue la mejor decisión que pude tomar...